Relación entre jefe y community manager: cómo hacer que la gestión de redes sociales funcione

Las redes sociales se han convertido en un canal imprescindible de las empresas para acercarse a sus clientes y establecer lazos duraderos con ellos. De ahí que la gestión de las mismas se haya vuelto una herramienta muy importante de marketing online.

Establecer una buena estrategia en redes sociales y estar siempre presente en estas requiere un trabajo continuo que lleva a las empresas a contratar la figura del community manager.

Cuando un empresario contrata a un especialista en la gestión de redes sociales, lo hace con unas expectativas a veces demasiado elevadas de lo que éste podrá conseguir, especialmente si se tiene en cuenta el precio que se está pagando por este servicio que en cambio requiere una gran inversión de tiempo. Esto, sumado a que algunos jefes creen saber más del asunto que los especialista community manager puede originar que la relación entre el jefe y este especialista no esté a la altura de poder aprovechar las grandes ventajas que pueden conseguirse con la gestión de las redes sociales.

Algunos de los problemas más frecuentes son los siguientes.

  1. No se establecen los objetivos a conseguir ni la estrategia que seguir. Esto puede parecer una obviedad, pero los community manager necesitan que las empresas contratantes les den unos puntos clave de la estrategia que quieren llevar en sus redes sociales y de los objetivos que quieren alcanzar. El no disponer de esta información, el trabajo del especialista se ve dificultado, incluso esto lleva a que los jefes no estén contentos con su trabajo por no conseguir los objetivos que les gustarían. En resumen, el community manager debe recibir unas pautas básicas que encaminen su trabajo hacia la consecución de objetivos que busca la empresa.
  2. Cambiar mucho de estrategia. Al igual que es negativo no comunicar la estrategia que se quiere seguir, lo es cambiar continuamente ésta. De esta forma se dificulta la consecución de objetivos y el trabajo del community.
  3. Esperar que el CM lo conozca todo sobre la compañía para la que trabaja sin que nadie se lo haya explicado primero. Una situación muy común es la del jefe que manda una fotografía a su comunnity manager, y espera que éste sepa en qué consiste lo que aparece en la fotografía y pueda hablar sobre ello en redes sociales. Es importante mantener siempre informado al comunnity manager de todos los movimientos importantes que se quieren compartir con el público, así como de responder las preguntas que éste haga sobre la compañía o su actividad. Para evitar errores, es necesario un proceso de puesta en común de objetivos a modo de breafing para que el Community Manager conozca de primera mano cuál debe ser la orientación de su trabajo.No sólo nos referimos a conocer la imagen que la empresa quiera proyectar en canales sociales y en cualquier otro ámbito del entorno online, también a enfocarse desde un conocimiento previo de todo lo relacionado con la empresa.
  4. Preocuparse sólo por aumentar el número de seguidores. Para algunos jefes, lo único importante es tener o aumentar el mayor número posible de seguidores o amigos en las redes sociales de su empresa, sin llegar a tener en cuenta que lo importante no es esta cantidad, sino la calidad de los mismos y su predisposición a consumir la marca o reportar engagement.